BIZCOCHO NEVADO DE CHOCOLATE y REMOLACHA


Mucho tiempo hacía que tenía ganas de hacer algo con la remolacha, me encanta su color y apenas la había probado, solo rallada en ensaladas, y nunca fresca.

Me he decidido al final por un bizcocho de chocolate y remolacha que todo el mundo asegura que está buenísimo y aportaba una textura ideal al bizcocho.

Tengo que decir que me ha sorprendido mucho, aporta una textura y una esponjosidad al bizcocho increíbles. En cuanto al sabor, decir que no lo he notado apenas en esta preparación, ni siquiera en las rodajas confitadas que le he puesto por arriba.....pero quedan bonitas :-)

Un bizcocho de chocolate húmedo, esponjoso y suave que nos ha encantado.

Me ha apetecido llamarlo "nevado" porque estoy viendo fotos de las nevadas que están cayendo estos días y me ha recordado a la nieve al espolvorearlo con el azúcar glasé.

Hay muchas recetas por la red, todas muy parecidas. Yo me he guiado por la receta de La cocina de Frabisa, aunque modificando las cantidades a mi gusto.

LUBINA A LA SAL



Una de las mejores maneras para mi de preparar este pescado entero. Queda perfecto, en su punto y muy jugoso.

Soy de la teoría de que cuando un pescado es bueno, cuanta menos preparación lleve mejor. El secreto está en el punto de cocción, y, a mí, con este método me queda siempre muy bien.

Lo he acompañado con unas verduras salteadas, tipo pisto, buenísimas.

No pensaba en esta receta, pero cuando he ido hoy al mercado y me han ofrecido esta lubina salvaje de Muxía, no pude resistirme. Además, no estaba muy cara, así que me la traje y en media hora preparé esta exquisita receta.

EMPANADAS ARGENTINAS (de choclo y caprese)



Holaaaaaa!! Por fin me he sacudido la pereza y arranco con el blog de nuevo.

Como ya sabéis, he pasado parte del mes de diciembre en Argentina y he venido cargada de recetas, así que, tenía que empezar si o si con una receta de allá.

Este fue el primer plato que probé nada más llegar a Argentina, unas maravillosas empanadas, como allí las llaman.

Las empanadas en Argentina son un emblema de la cocina autóctona, y cada región y provincia cambió los ingredientes para adaptarlas a los más fáciles de conseguir....como debe ser. Las hay de mil sabores, al horno, fritas, con masa hojaldrada...infinidad de variedades.

Las que yo probé el primer día eran de carne, de pollo y panceta y de queso con pavo. Un delicioso plato con el que nos agasajó Liliana nada más llegar, buenísimas y llenas de sabor. Yo he querido traeros estas un poco distintas a las que solemos hacer aquí, sacadas de los libros de recetas que me traje de allí.


Ingredientes:

Obleas de masa de empanada (empanadilla). 

(Yo usé las de La Cocinera, la primera vez la hice en casa y no me salió bien. De todas formas os dejo la receta de la masa al final del post por si queréis probarla, tal y como viene en el libro. Yo tengo que repetirla otro día bien hecha)

Con estas cantidades de relleno te pueden salir unas 20 empanadas en total, dependiendo de la cantidad que pongas. Una vez rellenas, se pueden congelar antes de hornearlas para hacer en cualquier ocasión.

Para el relleno de choclo (maíz):

1 cebolla mediana picada (yo usé 2 cebolletas)
1/2 pimiento rojo pelado y picado en cuadraditos
2 latas pequeñas de choclo en grano (maíz al natural)
1 cucharadita de perejil picado
2 cucharaditas de orégano
1 cucharadita de pimentón
Sal y pimienta
25 gr. de mantequilla
2 cucharadas de harina
1 vasito de leche caliente (unos 180 ml.)
3 cucharadas de aceite
80 gr. de queso parmesano o provolone rallado

- Rehogar las cebollas y el pimiento en el aceite hasta que apenas se doren y retirar del fuego.

- Agregar el choclo escurrido y los condimentos (perejil, orégano, pimentón, sal y pimienta) y mezclar bien.

- Añadir la mantequilla, derretir en el fuego de nuevo un poco, espolvorear con la harina y cocinar un momento.

- Agregar la leche caliente de golpe y mezclar rápidamente para que se espese. Cocinar un minuto, dejar enfriar y mezclar con el queso rallado.

Para el relleno de las caprese:

150 gr. de queso mozzarella, cortado en cubos (no vale el fresco) *
1 tomate grande pelado y sin semillas cortado en cubos
Un puñado de hojas de albahaca fresca cortadas en juliana
Sal y pimienta.

* El queso mozarella que compramos fresco en un líquido no sirve para esta preparación. Suelta mucha agua y se empapa todo. Tiene que ser en barra. Aquí no lo he encontrado, así que he usado un mozarrella en lonchas y lo he cortado en cuadrados.

- Estas son sencillísimas. Solo hay que mezclar los ingredientes en un bol y salpimentar.

Para montarlas solo tenéis que poner una cucharada en el centro de la oblea, humedecer los bordes con agua para que se peguen bien y plegar los bordes sobre si mismos con la forma deseada.

Sólo un truco que me enseñó Liliana para las que lleven queso: hay que dejar un agujero para que salga el vapor y no rompan. 

Se os puede escapar por ahí un poco de queso pero no importa, están buenísimas!!

Yo las caprese las monté en forma de saquito para que el agujero quedase hacia arriba y no se me escapara el queso por la bandeja. Secar también los tomates con un papel absorbente para que no lleve mucho líquido. 

Allí cada sabor lo cierran de distinta forma para distinguirlas, una idea genial!

Las de choclo hay que cerrarlas muy bien para que no se escape la besamel (procurar que os quede bien compacta la besamel, no poner mucha leche que luego no tiene arreglo).

- Meterlas unos 20 minutos en la heladera/nevera :-).

- Aceitar una placa de horno y colocar las empanadas sin que se toquen.

- Hornearlas en el horno precalentado a temperatura alta (200-220º) hasta que estén doradas (unos 15 minutos).



Cuando hice la foto estaban aún calientes, pero si las dejáis atemperar un poco el relleno está más compacto.

Están buenísimas!! Os sorprenderá el sabor de las empanadas de choclo, están de muerte con el toque picante de la pimienta!

Apuntes:

El libro dice en las de choclo que se pinchen apenas con un palillo varias veces en el borde del pliegue, pero yo lo hice la primera vez y se me salió todo el relleno por ahí. 

Quizás estaba un poco líquido el relleno, pero esta vez no las pinché y no pasó nada, solo se me escapó un poco de líquido en un punto que quedó mal pegada (ojo con cerrarlas muy bien).

He utilizado las obleas de La Cocinera, que son las más parecidas a las que ví allí. La primera vez hice yo la masa con la receta del libro, pero me quedó un poco blanda y no merece la pena, la verdad. Además no me quedó tan blanca.

Si tenéis vosotros una buena receta de masa para empanadillas podéis usarla, por supuesto, pero estas quedan perfectas.

También indica la receta que se pinten con huevo pero allí las tomé sin pintar y me encantaron así que no lo hice tampoco.

Os dejo una foto de las primeras que hice, con la masa hecha en casa, que me quedaron casi vacías y muy húmedas las de queso por utilizar el queso de mozzarella fresco, para que no tengáis la tentación :-D



Os dejo la receta de la masa que trae el libro por si quereis hacerla en casa:

1 kg. de harina
200 gr. de grasa de pella (manteca de vaca) o margarina
Sal (una cucharadita) y agua.

- Mezclar la harina con la sal, agregar la grasa derretida y tibia y mezclar bien.
- Añadir agua hasta obtener una masa que se pueda trabajar sobre una superficie enharinada.
- Amasar y formar un bollo que se dejará descansar tapado 20 minutos.
- Estirar la masa hasta lograr un espesor de 3 mm. y cortar círculos de 12 a 14 cm. Reservar en la heladera hasta utilizar.

(Si usaís la margarina como hice yo no os quedará tan blanca como la masa típica criolla. El secreto está en usar la grasa de pella)



Hoy no os pongo lo de "espero que os gusten" porque estoy segura que os encantarán.

Besooooossss!!